La reelección de Donald J. Trump como el 47º presidente de los Estados Unidos marcó un hito histórico en la política y la economía global. Con una contundente victoria en el voto popular y el Colegio Electoral, además de un Congreso republicano fortalecido, Trump inicia una nueva era de gobierno centrada en la «restauración del sentido común». Este evento desencadenó impactos inmediatos, como el aumento récord en los mercados bursátiles, el fortalecimiento del dólar, y reacciones geopolíticas clave: desde la disolución de caravanas migrantes hasta acuerdos energéticos con Europa y el acercamiento de líderes internacionales. Con un gabinete renovado, el equipo de Trump promete reformas económicas, seguridad, y liderazgo transformativo, generando expectativas de un resurgimiento de Estados Unidos como potencia mundial.